La situación financiera de Duro Felguera ha sido un tema de preocupación constante en el ámbito empresarial español. La compañía asturiana, que ha enfrentado una serie de desafíos en los últimos años, ha logrado un respiro tras resolver un conflicto significativo con la energética argelina Sonelgaz. Este acuerdo ha tenido un impacto positivo en su cotización bursátil, aunque la empresa aún enfrenta una serie de obstáculos que podrían complicar su recuperación a largo plazo.
### Resolución del Conflicto con Sonelgaz
Recientemente, Duro Felguera anunció que había llegado a un acuerdo amistoso con Sonelgaz, lo que ha llevado a un aumento del 11% en su cotización en la bolsa. Este conflicto, que se remonta a 2014, se centraba en la construcción de una central térmica de ciclo combinado en Djelfa, Argelia. Sonelgaz había solicitado un arbitraje de 413 millones de euros, lo que había puesto a Duro Felguera en una situación financiera precaria.
El acuerdo implica la cesión del proyecto de Djelfa a un consorcio de empresas chinas, liderado por China Power Engineering & Consulting Group International Engineering. Este movimiento no solo resuelve las controversias existentes, sino que también permite a Duro Felguera liberar recursos que podrían ser utilizados para abordar otros problemas financieros.
Sin embargo, a pesar de esta buena noticia, la empresa sigue enfrentando una crisis significativa. En el último año, su cotización ha caído un 47,6%, y aunque ha tenido un leve repunte del 10,56% desde el inicio de 2024, esto no es suficiente para compensar las pérdidas acumuladas. La situación se complica aún más por el hecho de que Duro Felguera se encuentra en preconcurso de acreedores, lo que significa que debe negociar con sus acreedores para evitar la quiebra.
### Desafíos Financieros Persistentes
A pesar de la resolución del conflicto con Sonelgaz, Duro Felguera no ha salido de la crisis en la que se encuentra. La empresa ha reportado mayores pérdidas en 2024 y un incremento mínimo en sus ingresos. Esto plantea serias dudas sobre su capacidad para recuperarse y volver a ser rentable en el futuro cercano.
La situación financiera de Duro Felguera se ha visto agravada por la falta de un acuerdo con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para capitalizar su deuda. La empresa tiene hasta el 11 de junio para llegar a un acuerdo con los bancos, lo que añade presión a su situación financiera. A esto se suma el hecho de que Duro Felguera ha recibido ayudas públicas significativas, incluyendo un rescate de 120 millones de euros en forma de préstamos ordinarios y participativos, que debe devolver con intereses. Además, el gobierno regional de Asturias también ha aportado 6 millones de euros, lo que subraya la importancia de la empresa para la economía local.
La situación de Duro Felguera es un reflejo de los desafíos más amplios que enfrenta el sector de la ingeniería en España. La dependencia de contratos internacionales y la competencia de empresas extranjeras han puesto a muchas empresas en una posición vulnerable. La falta de un marco regulatorio claro y el impacto de las políticas gubernamentales también han contribuido a la incertidumbre en el sector.
En resumen, aunque Duro Felguera ha logrado un avance significativo al resolver su conflicto con Sonelgaz, la empresa aún enfrenta una serie de desafíos financieros que podrían comprometer su futuro. La necesidad de un acuerdo con los bancos y la presión de las pérdidas acumuladas son factores que no pueden ser ignorados. La situación de Duro Felguera es un recordatorio de la fragilidad del sector de la ingeniería y la importancia de una gestión financiera sólida en tiempos de crisis.