Cada 29 de octubre se conmemora el Día Mundial del Ictus, una fecha que nos invita a reflexionar sobre esta grave enfermedad neurológica que afecta a miles de personas cada año. En España, se registran aproximadamente 90,000 nuevos casos anualmente, y más de 23,000 personas mueren a causa de esta condición. Aunque factores como la hipertensión y el tabaquismo son comúnmente reconocidos como riesgos, hay un aspecto menos evidente que merece atención: la salud bucal, específicamente la periodontitis.
La periodontitis, una enfermedad de las encías que a menudo pasa desapercibida, puede aumentar significativamente el riesgo de sufrir un ictus, incluso en personas jóvenes y sin antecedentes cardiovasculares. La doctora Xiana Pousa, directora médica de Clínicas MAEX Pousa, enfatiza que cuidar la salud bucal y tratar la periodontitis puede ser un factor clave en la prevención de esta enfermedad. La boca actúa como una puerta de entrada al organismo, y cuando está infectada, puede desencadenar un estado de inflamación crónica que afecta a todo el cuerpo.
### La Relación Entre Periodontitis e Ictus
La conexión entre la salud bucal y el riesgo de ictus no es nueva. Desde los años 60 y 70, dentistas comenzaron a notar que muchos pacientes con problemas cardíacos también presentaban un mal estado periodontal. A medida que se realizaron más investigaciones, se descubrió que las bacterias orales podían ingresar al torrente sanguíneo a través de las encías infectadas, lo que podría contribuir a la formación de placas en las arterias y aumentar el riesgo de infartos y accidentes cerebrovasculares.
Estudios poblacionales, como el NHANES en Estados Unidos, han demostrado que las personas con periodontitis severa tienen un mayor riesgo de sufrir infartos y accidentes cerebrovasculares, incluso después de considerar otros factores de riesgo como el tabaquismo y la diabetes. Esta relación es bidireccional: la inflamación periodontal puede agravar la aterosclerosis, y las enfermedades cardiovasculares pueden empeorar la salud de las encías. Por lo tanto, es fundamental controlar la salud oral como parte de la prevención cardiovascular.
La boca es un punto de infección significativo, y las bacterias presentes en las encías pueden tener efectos devastadores en el organismo. La doctora Pousa explica que la infección de las encías a menudo no causa dolor inmediato, lo que permite que la enfermedad progrese sin ser detectada. Con el tiempo, esta inflamación crónica puede llevar a una respuesta inflamatoria sistémica que predispone a problemas cardiovasculares y accidentes cerebrovasculares.
### Importancia de la Prevención y el Cuidado Bucal
La salud de las encías es especialmente relevante en personas jóvenes, ya que la gingivitis, una forma temprana de enfermedad periodontal, puede comenzar en la adolescencia. Si no se trata, puede evolucionar hacia la periodontitis, lo que aumenta el riesgo de inflamación sistémica y daño vascular. En la actualidad, factores como el estrés, la falta de sueño y una dieta deficiente pueden agravar esta situación, haciendo que la educación sobre la conexión entre la salud bucal y el riesgo de ictus sea crucial.
Los síntomas que pueden indicar problemas en las encías incluyen sangrado al cepillarse, mal aliento persistente, encías rojas o hinchadas, y movilidad dental. Estos signos son indicativos de una posible enfermedad periodontal que requiere atención inmediata. La revisión odontológica regular es esencial para detectar problemas incipientes y garantizar que la boca no sea un punto de entrada para bacterias nocivas.
La comunidad médica y odontológica debe estar mejor informada sobre la relación entre la salud bucal y el riesgo de ictus. A pesar de la alta prevalencia de enfermedades periodontales y su impacto en la salud general, muchas veces no se les da la importancia que merecen. La Sociedad Española de Periodoncia promueve la idea de que todos son pacientes periodontales hasta que se demuestre lo contrario, lo que subraya la necesidad de una evaluación más exhaustiva de la salud bucal.
Para mantener las encías sanas y reducir el riesgo de ictus, es fundamental adoptar hábitos diarios como cepillarse los dientes al menos tres veces al día, usar hilo dental y realizar revisiones odontológicas cada seis meses. Además, una alimentación equilibrada y la suplementación de Omega 3, así como vitaminas C y D, pueden ser beneficiosas, especialmente en personas con antecedentes familiares de enfermedad periodontal.
La salud bucal es un aspecto crucial de nuestra salud general, y su descuido puede tener consecuencias graves. La prevención y el cuidado adecuado de las encías no solo mejoran la salud dental, sino que también pueden ser determinantes en la reducción del riesgo de ictus y otras enfermedades cardiovasculares. Por lo tanto, es vital que cada individuo asuma la responsabilidad de cuidar su salud bucal como parte de un enfoque integral hacia el bienestar.
