La gestión de la crisis sanitaria provocada por la pandemia de COVID-19 ha sido objeto de múltiples análisis y críticas, especialmente en lo que respecta a la atención brindada a las residencias de mayores. Recientemente, un juzgado de Madrid ha tomado decisiones significativas en relación con la responsabilidad de altos funcionarios de la Comunidad de Madrid en la atención a estos centros durante la primera ola del virus. La jueza Isabel Durantez Gil ha desestimado el recurso presentado por Francisco Javier Martínez Peromingo, ex director general de Coordinación Sociosanitaria, quien solicitaba el sobreseimiento de un procedimiento abierto en su contra por un supuesto delito de discriminación en la prestación de servicios públicos.
La magistrada ha argumentado que la gestión del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso durante la pandemia, particularmente la implementación de los Protocolos de no derivación hospitalaria y la ineficacia del Plan de choque, constituyen el «punto de arranque de la eventual discriminación» que sufrieron los residentes en las residencias de mayores. Esta decisión es un paso importante en la investigación que busca esclarecer las circunstancias que rodearon las muertes de numerosos ancianos en estos centros durante la crisis sanitaria.
### Contexto de la Investigación Judicial
La investigación se centra en las decisiones tomadas por el Gobierno de la Comunidad de Madrid en los primeros meses de la pandemia, cuando el sistema sanitario se vio abrumado por la llegada del virus. En este contexto, los Protocolos de no derivación hospitalaria fueron criticados por impedir el traslado de pacientes mayores a hospitales, lo que, según las denuncias, resultó en una atención desigual y en la muerte de muchos residentes. La jueza ha señalado que la implicación de Martínez Peromingo en la elaboración y aplicación de estos protocolos es «indiscutible» y ha rechazado la solicitud de acumular las distintas causas abiertas en varios juzgados, argumentando que cada caso es único y debe ser tratado de manera diferenciada.  
Los familiares de los fallecidos han denunciado que estos protocolos institucionalizaron la discriminación por razón de enfermedad o discapacidad, lo que ha llevado a un clamor por justicia y responsabilidad. La jueza ha dejado claro que, aunque los investigados comparten ciertos elementos, cada caso involucra a diferentes víctimas y contextos, lo que justifica la existencia de múltiples procedimientos.
### Implicaciones de la Decisión Judicial
La decisión de la jueza de continuar con la investigación y no archivar el caso tiene importantes implicaciones para la rendición de cuentas en la gestión de la pandemia. La imputación de altos cargos del Gobierno de Ayuso, como Martínez Peromingo y su antecesor Carlos Mur, ha puesto en el centro del debate la responsabilidad política en la atención a los mayores durante una crisis sanitaria sin precedentes.  
La jueza ha enfatizado que la existencia y aplicación de los protocolos, así como la falta de un Plan de choque efectivo, fueron factores determinantes en la atención a los residentes. Esto no solo afecta a los funcionarios implicados, sino que también plantea preguntas sobre la gestión general del Gobierno regional y su capacidad para proteger a los grupos más vulnerables en situaciones de emergencia.
La investigación ha sido impulsada por organizaciones como Marea de Residencias, que han abogado por la justicia para los ancianos y sus familias. La decisión de la jueza de no archivar el caso es vista como un reconocimiento de la gravedad de las acusaciones y de la necesidad de una investigación exhaustiva que esclarezca las responsabilidades.
A medida que avanza la investigación, se espera que se presenten más pruebas y testimonios que puedan arrojar luz sobre las decisiones tomadas en los primeros meses de la pandemia y su impacto en la vida de los residentes de las residencias. La atención mediática y pública sobre este caso podría influir en futuras políticas y en la forma en que se manejan situaciones similares en el futuro.
La situación en las residencias durante la pandemia ha sido un tema de gran preocupación y debate, y la investigación judicial es un paso hacia la búsqueda de justicia y la mejora de las condiciones de atención en estos centros. La responsabilidad de los funcionarios públicos en la gestión de crisis sanitarias es un tema que seguirá siendo relevante en el futuro, y este caso podría sentar un precedente importante para la rendición de cuentas en el ámbito de la salud pública.
La lucha por la justicia y la dignidad de los mayores en residencias continúa, y la sociedad observa con atención el desarrollo de esta investigación que podría tener repercusiones significativas en la política sanitaria y en la protección de los derechos de los ciudadanos más vulnerables.
