La última edición del Dakar fue un capítulo doloroso para Laia Sanz, quien se vio obligada a abandonar en la primera etapa, poniendo fin a una impresionante racha de 14 participaciones consecutivas. Sin embargo, tras ese tropiezo, la campeona de motociclismo ha encontrado una nueva oportunidad que la llevará de regreso a las dunas del desierto. Laia ha sido seleccionada para formar parte del equipo Ebro, donde competirá con un T1+ en la 48ª edición del Dakar, programada del 3 al 17 de enero. Este nuevo proyecto no solo representa un regreso al Dakar, sino también una nueva etapa en su carrera, donde la ambición y el deseo de competir se unen para crear una historia emocionante.
Laia Sanz, conocida por su tenacidad y habilidades excepcionales en el motociclismo, ha manifestado su entusiasmo por unirse a Ebro. «Unirme a un proyecto como el de Ebro me motiva enormemente. Es una marca con una gran historia y ser parte de este nuevo capítulo en el Dakar es algo muy especial para mí», comentó Sanz. Este nuevo desafío no solo le permitirá competir en el Dakar, sino que también le ofrece la oportunidad de demostrar su valía en un equipo que busca consolidarse en la categoría reina del rally.
### Un Proyecto Ambicioso y a Largo Plazo
El equipo Ebro tiene grandes planes para el futuro, no solo en el Dakar, sino también en el Mundial de Rally-Raid (W2RC). La estrategia es clara: competir con fabricantes de renombre como Ford, Toyota, Dacia y Mini. Aunque el éxito inmediato no está garantizado, el enfoque del equipo es construir una base sólida que les permita aspirar a más en los próximos años. Laia, con su vasta experiencia, será una pieza clave en este proceso, ayudando a afinar el vehículo y a maximizar su rendimiento en el desierto.
El Century T1+ que utilizará Laia ha demostrado ser competitivo, habiendo terminado en el top 10 en la edición anterior del Dakar. Sin embargo, el equipo es consciente de que cada detalle cuenta en esta dura competición. Por ello, Laia ya ha comenzado a realizar pruebas con el prototipo, acumulando kilómetros en jornadas de test en Marruecos. Este país servirá como campo de pruebas antes de su debut oficial en el Rally de Marruecos, que se llevará a cabo del 12 al 17 de octubre, y que será la última prueba de la temporada antes del Dakar.
La importancia de estos test no puede subestimarse. Cada kilómetro recorrido es una oportunidad para ajustar y mejorar el vehículo, y la experiencia de Laia será crucial para identificar áreas de mejora. La campeona ha expresado su deseo de hacer de este Dakar una experiencia memorable, no solo para ella, sino también para el equipo Ebro, que busca dejar su huella en el mundo del rally.
### La Pasión por la Competición
La pasión de Laia Sanz por el motociclismo es innegable. A lo largo de su carrera, ha demostrado ser una competidora feroz, acumulando múltiples títulos en diversas disciplinas. Su regreso al Dakar no solo es un testimonio de su resiliencia, sino también de su amor por el deporte. «No voy a parar hasta encontrar mi oportunidad», ha afirmado, y ahora, con el respaldo de Ebro, parece que esa oportunidad ha llegado.
El Dakar es conocido por ser una de las competiciones más desafiantes del mundo, y Laia está lista para enfrentarse a este reto. Con un equipo comprometido y un vehículo competitivo, su objetivo es claro: competir al más alto nivel y demostrar que puede estar entre los mejores. Laia Sanz no solo es una competidora; es una inspiración para muchos, mostrando que la perseverancia y la pasión pueden llevar a cumplir sueños, incluso después de enfrentar adversidades.
Con el Dakar 2026 a la vista, Laia Sanz se prepara para escribir un nuevo capítulo en su carrera, uno que promete ser tan emocionante como desafiante. La combinación de su experiencia, el apoyo de Ebro y su inquebrantable determinación la posicionan como una de las competidoras a seguir en esta emblemática carrera. La historia de Laia es un recordatorio de que, en el mundo del deporte, cada final puede ser un nuevo comienzo.