La economía española se encuentra en un momento crucial, marcado por la incertidumbre y la necesidad de ajustes fiscales. La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha emitido un informe que destaca tanto las mejoras en las previsiones macroeconómicas como las dificultades que enfrenta el Gobierno para cumplir con los compromisos fiscales europeos. Este análisis se centra en las proyecciones de crecimiento y déficit, así como en la importancia de un cambio de filosofía en la gestión fiscal del país.
**Mejoras en las Proyecciones Económicas**
La AIReF ha elevado su previsión de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) español para el año en curso, situándola en un 3%. Esta mejora se atribuye a varios factores, entre los que se incluyen el comportamiento positivo del comercio mundial, el aumento de la población inmigrante y el buen desempeño de los ingresos por turismo. Además, la revisión de las cifras de contabilidad nacional por parte del Instituto Nacional de Estadística (INE) ha contribuido a esta optimización de las previsiones. Sin embargo, a pesar de estas buenas noticias, la AIReF advierte sobre la inminente desaceleración del crecimiento, que podría caer hasta un 1,5% para el año 2030, en línea con las proyecciones de otros organismos internacionales.
El informe también señala que, aunque las previsiones de déficit han mejorado, se espera que el déficit se sitúe en un 2,5% del PIB para 2025, con una tendencia ascendente que podría llevarlo al 2,5% en 2030. Esta situación plantea serios interrogantes sobre la sostenibilidad fiscal del país, especialmente en un contexto donde las elecciones se acercan y las presiones de gasto podrían aumentar significativamente.
**Desafíos Fiscales y Necesidad de Reformas**
Uno de los puntos más críticos del informe de la AIReF es la advertencia sobre el riesgo de incumplimiento de la regla de gasto en la Administración Central y en la mayoría de las Comunidades Autónomas. Para cumplir con esta regla, se necesitarían ajustes adicionales de 12.000 millones de euros en 2025 y 2.600 millones en 2026. Esta situación es alarmante, ya que indica que el Gobierno podría estar operando en un marco de gasto insostenible, lo que podría llevar a sanciones por parte de la Unión Europea si no se toman medidas correctivas.
La presidenta de la AIReF, Cristina Herrero, ha enfatizado la necesidad de un «cambio de filosofía» en la gestión fiscal del país. En un contexto donde la economía parece estar «anestesiada», es fundamental que el Gobierno adopte un enfoque proactivo para evitar que las malas decisiones fiscales del presente se conviertan en problemas insuperables en el futuro. Herrero ha comparado la situación actual con el cuento de los Tres Cerditos, sugiriendo que es crucial construir una base sólida para enfrentar los desafíos económicos que se avecinan.
La AIReF también ha señalado que el incumplimiento de las reglas de gasto podría llevar a un procedimiento de déficit excesivo, lo que tendría consecuencias graves para la economía española. En este sentido, el informe subraya la importancia de que Hacienda cumpla con la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera (LOEPSF), que exige que las propuestas de objetivos de estabilidad presupuestaria sean consistentes con las reglas de gasto nacionales y europeas.
**Perspectivas Futuras y Recomendaciones**
A medida que se avanza hacia el año 2026, la AIReF proyecta una desaceleración gradual del crecimiento, lo que indica que el país debe prepararse para un entorno económico más desafiante. La dependencia de factores externos, como el turismo y los fondos europeos, podría hacer que la economía española sea vulnerable a cambios en el contexto global. Por lo tanto, es esencial que el Gobierno implemente políticas que fortalezcan la resiliencia económica y promuevan un crecimiento sostenible.
El informe de la AIReF es un llamado a la acción para que las autoridades españolas tomen en serio las advertencias sobre la sostenibilidad fiscal. La mejora de las previsiones macroeconómicas es un paso positivo, pero no debe llevar a la complacencia. La gestión fiscal responsable y la planificación a largo plazo son fundamentales para garantizar que España no solo cumpla con sus compromisos fiscales, sino que también esté preparada para enfrentar los desafíos económicos del futuro. En este sentido, la AIReF ha dejado claro que no se puede vivir eternamente con un presupuesto prorrogado y que es imperativo actuar con responsabilidad y previsión.
