En la era de las redes sociales, cada vez más figuras públicas, desde influencers hasta actrices, se atreven a mostrar su lado más vulnerable. Este fenómeno no solo se limita a compartir imágenes sin maquillaje, sino que también incluye la apertura sobre sus luchas emocionales y la presión que sienten en su día a día. Laura Escanes, una conocida creadora de contenido, ha sido una de las voces que ha resonado con muchos al compartir su experiencia de vivir en piloto automático, a pesar de estar en un momento que debería ser celebrado.
La reflexión de Escanes ha captado la atención de sus seguidores, quienes se sienten identificados con su mensaje. En un reciente post, ella expresó: «No os voy a mentir, estas semanas están siendo demasiado intensas mentalmente y con bastante ansiedad. Y es absurdo porque todo lo que me está pasando es bueno, estoy en un momento buenísimo y estoy muy bien rodeada. Tengo salud, los míos tienen salud y todo va sobre ruedas. Pero he entrado en una dinámica de trabajar en piloto automático y apenas parar para disfrutar de las cosas».
Este tipo de confesiones no son aisladas. La psicología moderna ha comenzado a explorar cómo la constante búsqueda de logros y la presión por mantener un ritmo acelerado pueden llevar a las personas a perder de vista el presente. La psicóloga Sara Martín Sillero, codirectora de Consulta Despertares Alcobendas, explica que el cerebro humano está diseñado para adaptarse a las situaciones, lo que puede llevar a una sensación de insatisfacción constante. Este fenómeno se conoce como «adaptación hedónica», donde las personas se acostumbran rápidamente a sus logros y comienzan a desear más, en lugar de disfrutar lo que ya han alcanzado.
La adaptación hedónica puede manifestarse en diferentes plazos, desde semanas hasta meses, dependiendo de la intensidad de la experiencia y de la persona. La clave para contrarrestar este efecto radica en aprender a vivir en el presente y apreciar los momentos de satisfacción y gratitud. La psicóloga Martín Sillero enfatiza que es fundamental no confundir el disfrute momentáneo con la felicidad duradera, ya que esto puede llevar a una frustración constante.
### La Búsqueda de la Plenitud en el Camino
La psicóloga Beatriz Corbí Gran también aborda la experiencia de Escanes, señalando que lo que le sucede es algo común. Ella plantea la pregunta: «¿a quién no le ha pasado?». La adaptación a nuevas situaciones es una parte natural de la experiencia humana, donde lo que antes era emocionante se convierte en rutina, disminuyendo así el placer inicial. Sin embargo, esta adaptación puede convertirse en un ciclo de insatisfacción si no se maneja adecuadamente.
Corbí Gran sugiere que es esencial centrarse en el proceso y disfrutar del camino hacia los objetivos, en lugar de obsesionarse con la meta final. «Podemos tener un objetivo claro, pero hasta llegar a él, ayuda vivir conscientemente ese recorrido disfrutando de los pequeños logros», afirma. Este enfoque no solo permite una mayor satisfacción en el presente, sino que también fomenta un sentido de propósito y significado en la vida.
Además, la psicóloga destaca la importancia de que las acciones que tomemos para nuestro bienestar estén alineadas con nuestros valores personales, en lugar de buscar validación externa. Esto implica un cambio de mentalidad que puede ser liberador y transformador. Cuando las personas viven con un sentido de propósito, experimentan emociones placenteras que tienden a ser más duraderas.
### Herramientas para Vivir en el Presente
La reflexión de Laura Escanes y el análisis de las psicólogas nos invitan a considerar cómo manejamos nuestras propias vidas en un mundo que a menudo nos empuja a ir más rápido. La ansiedad y la presión por cumplir con expectativas pueden llevarnos a un estado de piloto automático, donde olvidamos disfrutar de los momentos que realmente importan.
Para contrarrestar esto, es fundamental desarrollar herramientas que nos ayuden a vivir en el presente. Esto puede incluir prácticas como la meditación, la atención plena y la gratitud. Estas técnicas no solo ayudan a reducir la ansiedad, sino que también fomentan una mayor conexión con nuestras emociones y experiencias.
La vida está llena de altibajos, y es natural que experimentemos momentos de insatisfacción. Sin embargo, al aprender a apreciar el viaje y a celebrar nuestros logros, podemos encontrar un equilibrio que nos permita disfrutar de la vida en su totalidad. La historia de Laura Escanes es un recordatorio poderoso de que, aunque la vida puede ser intensa y desafiante, siempre hay espacio para la reflexión y el crecimiento personal.
