La Universidad de Connecticut (UConn) ha reafirmado su dominio en el baloncesto femenino al conquistar su duodécimo título de la NCAA el 6 de abril de 2025, tras una contundente victoria sobre Carolina del Sur con un marcador de 82-59. Este triunfo no solo representa un hito en la historia del deporte, sino que también ha resonado profundamente en la familia Bryant, especialmente en la figura de Vanessa Bryant, quien rindió homenaje a su hija Gigi en un emotivo tributo.
Gigi Bryant, quien habría cumplido 18 años el mismo día del campeonato, siempre soñó con jugar para UConn. Vanessa compartió en redes sociales que «Gigi habría amado estar allí con ustedes», acompañando su mensaje con una de las citas más memorables de su hija: «Cuando piensas que no puedes, UConn». Este mensaje encapsula no solo la pasión de Gigi por el baloncesto, sino también su conexión especial con el equipo de UConn.
Desde muy joven, Gigi mostró un amor inquebrantable por el baloncesto y, en particular, por el programa de UConn. A los 11 años, tuvo la oportunidad de visitar el vestuario de las Huskies en Los Ángeles, un momento que su padre, Kobe Bryant, describió como inolvidable. La relación entre Gigi y UConn se fortaleció con el tiempo, y en marzo de 2019, padre e hija asistieron a la Noche de Seniors en el Gampel Pavilion, donde la emoción de Gigi era palpable. Kobe compartió en sus redes sociales lo feliz que estaba de ver a su hija disfrutar del baloncesto de alto nivel.
La dedicación de Gigi a su sueño de jugar para UConn fue evidente. En una ocasión, Kobe comentó: «Ella está decidida a ir a UConn. Ese es su lugar; es donde quiere estar». Esta determinación se reflejó en una carta que Gigi escribió tras la derrota de UConn en las semifinales de la NCAA en 2017, donde incluyó la frase que se convirtió en un lema para el equipo: «Cuando piensas que no puedes, UConn». Tras su trágica muerte en 2020, UConn honró su memoria con un jersey número 2 y otros tributos conmovedores, manteniendo viva su esencia dentro del equipo que tanto amaba.
El impacto de la familia Bryant en el baloncesto femenino ha sido significativo. Kobe fue un ferviente defensor del deporte, dedicando tiempo a entrenar el equipo de Gigi, asistiendo a partidos de la WNBA y apoyando a jugadoras como Diana Taurasi. Su legado continúa a través de Vanessa, quien ha mantenido viva la pasión de Gigi por el baloncesto y ha seguido apoyando el crecimiento del deporte femenino. Su tributo tras la victoria de UConn es un recordatorio de que el legado de Gigi sigue siendo relevante y que su amor por el baloncesto perdura.
La victoria de UConn no solo celebra un título más en su impresionante historia, sino que también simboliza la conexión emocional que muchos sienten hacia Gigi Bryant. En un momento donde el baloncesto femenino sigue ganando visibilidad y respeto, el recuerdo de Gigi y su sueño de jugar para UConn se convierte en una fuente de inspiración para futuras generaciones de jugadoras. La historia de Gigi es un testimonio de la pasión y el compromiso que se necesita para alcanzar los sueños, y su legado seguirá vivo en cada jugadora que aspire a ser parte de la historia de UConn y del baloncesto femenino en general.