El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha convocado recientemente una reunión de seguridad que duró aproximadamente tres horas, en la que se discutieron las próximas fases de la operación militar en Gaza. Este encuentro incluyó a figuras clave como el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Eyal Zamir, y los ministros de Defensa y Asuntos Estratégicos, Israel Katz y Ron Dermer, respectivamente. La situación en Gaza ha generado un intenso debate interno en Israel, donde la estrategia de Netanyahu de expandir el conflicto enfrenta crecientes resistencias tanto dentro del ejército como en el ámbito político.
Durante la reunión, se presentaron diferentes opciones para avanzar en la campaña militar, mientras que Netanyahu reiteró su firme intención de «derrotar» a Hamás. Sin embargo, esta postura ha suscitado preocupaciones sobre el bienestar de los rehenes israelíes, ya que fuentes cercanas al Gobierno han advertido que la intensificación de las operaciones podría poner en mayor riesgo a los 20 cautivos que se cree siguen con vida. La presión internacional también ha aumentado, con la ONU calificando la posible ocupación total de Gaza como «profundamente alarmante». El subsecretario general de la ONU, Miroslav Jenca, ha expresado que cualquier escalada militar tendría «consecuencias catastróficas» y podría poner en peligro a los rehenes restantes.
### La Resistencia Militar y la Oposición Interna
La estrategia de Netanyahu ha encontrado resistencia dentro de las propias FDI. Eyal Zamir, el jefe del Estado Mayor, ha manifestado su oposición a la expansión de las operaciones militares, lo que ha llevado a la postergación de un viaje programado a Estados Unidos. A pesar de que las FDI controlan actualmente aproximadamente el 75% de la Franja de Gaza, el nuevo plan estratégico de Netanyahu busca avanzar hacia el territorio restante, lo que podría colocar todo el enclave bajo dominio israelí.
Este movimiento se produce en un contexto en el que cientos de exoficiales israelíes han firmado una carta dirigida a Trump, instándolo a ejercer presión sobre Netanyahu para detener la ofensiva. La situación humanitaria en Gaza es crítica, con informes que indican que el conflicto ya ha causado la muerte de más de 61,000 palestinos. La presión internacional se ha intensificado, con figuras políticas europeas que han solicitado formalmente un embargo de armas a Israel y sanciones contra aquellos responsables de violaciones del derecho internacional.
La comunidad internacional observa con creciente preocupación la posibilidad de una anexión total de Cisjordania, otro territorio palestino bajo ocupación militar desde 1967. Esta situación complica aún más el panorama geopolítico en la región, donde los llamamientos a la paz y la resolución del conflicto parecen cada vez más lejanos.
### Reacciones Internacionales y el Futuro del Conflicto
La presión diplomática sobre Israel ha aumentado, especialmente desde que algunos grupos políticos en Europa han solicitado un embargo de armas y sanciones. Estas peticiones reflejan la creciente preocupación por las repercusiones humanitarias del conflicto. En este contexto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha dado su visto bueno a Netanyahu para llevar a cabo una «operación militar más agresiva». Sin embargo, esta postura no cuenta con el respaldo unánime dentro de las FDI, lo que sugiere una división interna sobre la dirección que debe tomar la estrategia militar.
A medida que se intensifican las tensiones, la situación en Gaza se vuelve cada vez más crítica. La posibilidad de una ocupación total de la Franja de Gaza plantea serias preguntas sobre el futuro de la región y la seguridad de los rehenes. Mientras tanto, la comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos, esperando que se tomen decisiones que prioricen la paz y la estabilidad en la zona. La situación actual no solo afecta a los involucrados directamente en el conflicto, sino que también tiene repercusiones globales, ya que el mundo observa cómo se desarrollan los acontecimientos en esta región tan volátil.