La reciente muerte del papa Francisco a los 88 años ha marcado un hito en la historia de la Iglesia Católica. Su fallecimiento, ocurrido el lunes, ha desencadenado una serie de protocolos funerarios que reflejan su deseo de simplificar el ceremonial papal. El cardenal Kevin Joseph Farrell, camarlengo de la Iglesia, ha liderado el rito de constatación de su muerte, que se llevó a cabo en la Casa Santa Marta, donde el papa residía. Este acto, que se realizó a las 20:00 horas, ha sido el primer paso en un proceso que culminará en su sepultura, un momento que muchos fieles esperan con gran reverencia.
### Protocolo Funerario y Rito de Constatación
El Vaticano ha activado un conjunto de protocolos funerarios que se rigen por el Ordo Exsequiarum Romani Pontificis, un libro litúrgico que fue actualizado por el papa Francisco en abril de 2024. Este documento, que busca modernizar y simplificar el ceremonial fúnebre, ha eliminado algunas tradiciones que se consideraban obsoletas, como el uso de tres ataúdes y el catafalco. En su lugar, se ha optado por un único ataúd de madera con interior de zinc, enfatizando así la figura pastoral del papa.
El rito solemne de la constatación de su muerte se ha llevado a cabo con la presencia de familiares, el decano del colegio cardenalicio y otros dignatarios de la Iglesia. Este acto, que se ha realizado en la capilla privada de la Casa Santa Marta, ha marcado el inicio de un proceso que culminará con el traslado del cuerpo del papa a la basílica vaticana, donde se espera que reciba el homenaje de los fieles. Este traslado está programado para el miércoles 23 de abril, y se llevará a cabo de acuerdo con las modalidades que se determinen en la primera congregación de los cardenales.
La Casa Santa Marta, que ha sido el hogar del papa Francisco durante su papado, ha sido el escenario de este emotivo rito. La elección de este lugar para la constatación de su muerte, en lugar de la habitación donde falleció, refleja el deseo del papa de modernizar y humanizar los rituales asociados a su figura.
### El Testamento Espiritual del Papa
Uno de los aspectos más conmovedores de la muerte del papa Francisco ha sido la revelación de su testamento espiritual, un documento que escribió de su puño y letra en 2022. En este testamento, el papa expresa su deseo de ser enterrado en la Basílica Papal de Santa María la Mayor, un lugar que siempre ha tenido un significado especial para él. En el documento, Francisco menciona su devoción a la Virgen María y su deseo de que sus restos mortales descansen en este antiguo santuario mariano.
El testamento comienza con una invocación a la Santísima Trinidad y refleja la profunda espiritualidad del papa. En él, Francisco manifiesta su esperanza en la vida eterna y su deseo de que su sepulcro sea sencillo, sin decoraciones, y con la única inscripción de su nombre: «Franciscus». Este deseo de simplicidad es un reflejo de su estilo de vida y su enfoque pastoral, que siempre priorizó la humildad y la cercanía con los fieles.
Además, el papa Francisco menciona en su testamento que los gastos de su entierro serán cubiertos por un benefactor, lo que demuestra su preocupación por no ser una carga para la Iglesia. También expresa su deseo de que su sufrimiento en los últimos años de su vida sea ofrecido por la paz mundial y la fraternidad entre los pueblos, un mensaje que resuena con su legado de promoción de la paz y el diálogo interreligioso.
La lectura pública de este testamento espiritual está programada para el día de su funeral, un momento que seguramente será emotivo y significativo para los fieles de todo el mundo. La figura del papa Francisco ha sido un faro de esperanza y compasión, y su legado perdurará en la memoria colectiva de la Iglesia y de la humanidad.
A medida que el mundo se prepara para rendir homenaje a este líder espiritual, la comunidad católica y los fieles de todo el mundo reflexionan sobre su impacto y su mensaje de amor, paz y unidad. La muerte del papa Francisco no solo marca el final de una era, sino que también abre un nuevo capítulo en la historia de la Iglesia, donde su legado seguirá inspirando a generaciones futuras.
