En el escenario político europeo, el nombre de Alvise Pérez ha resonado con fuerza tras su participación en las elecciones de 2024. Este agitador político, que se presentó bajo las siglas de su partido ‘Se acabó la fiesta’ (SALF), ha generado controversia no solo por su ascenso en el Parlamento Europeo, sino también por su actual enfrentamiento con sus dos compañeros de partido, Nora Junco y Diego Solier. La situación ha escalado a un punto en el que Pérez ha comenzado a presionar públicamente para que ambos dimitan, acusándolos de traición y de buscar únicamente beneficios personales.
La historia comienza con la elección de Pérez y su partido, que logró obtener tres escaños en el Parlamento Europeo. Alvise ocupó uno de ellos, mientras que Junco y Solier, quienes fueron designados por una agrupación de electores, se convirtieron en sus compañeros de viaje en esta nueva aventura política. Sin embargo, la relación entre ellos se ha deteriorado rápidamente. Pérez ha utilizado sus redes sociales y su canal de Telegram para lanzar ataques contra sus ex compañeros, acusándolos de traicionar a los más de 800,000 votantes que apoyaron a SALF.
### Las Acusaciones de Alvise Pérez
Las acusaciones de Alvise Pérez son contundentes. Según él, tanto Junco como Solier han votado en contra de su criterio en varias ocasiones y han estado en contacto con otros partidos, especialmente con el Partido Popular (PP) español. Pérez sostiene que ambos eurodiputados se han acercado al Grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), un movimiento que él considera una traición a los principios de su partido. En sus declaraciones, ha afirmado que Junco y Solier están más interesados en mantener sus cargos y los beneficios económicos que estos conllevan, que en representar a los votantes que los eligieron.
Pérez ha hecho hincapié en que los eurodiputados reciben un salario considerablemente mayor al que tenían anteriormente, además de dietas y otros beneficios que suman a su remuneración. En su opinión, esta situación ha llevado a sus ex compañeros a aferrarse a sus cargos, ignorando el mandato de los ciudadanos que los eligieron. La retórica de Pérez ha sido clara: «Es necesario que el pueblo español deje de permitir que todo aquél que logre un acta se sienta impune en la traición».
### Estrategias de Desprestigio
Para llevar a cabo su campaña de desprestigio, Alvise Pérez ha recurrido a tácticas que incluyen la difusión de información negativa sobre Junco y Solier. En sus publicaciones, ha expuesto situaciones que, según él, demuestran la falta de compromiso de sus compañeros con los principios de SALF. Por ejemplo, ha criticado a Junco por asistir a eventos de alto costo, como el Gran Premio de Motociclismo de Jerez, sugiriendo que su comportamiento es una burla hacia los votantes que confiaron en ella.
Además, ha señalado que Solier ha cerrado sus perfiles en redes sociales tras ser acusado de pactar en secreto con otros partidos, lo que ha alimentado aún más la narrativa de traición. En este contexto, Pérez ha utilizado su plataforma para movilizar a sus seguidores, a quienes se refiere como ‘ardillas’, instándolos a actuar en contra de Junco y Solier.
La situación ha llevado a un clima de tensión no solo entre los tres eurodiputados, sino también en el seno del Parlamento Europeo, donde las alianzas y las lealtades están en constante cambio. Pérez, que se ha declarado ‘no inscrito’ en ningún grupo político, parece estar buscando una nueva estrategia que le permita consolidar su poder y su influencia, a pesar de la creciente oposición de sus ex compañeros.
Este conflicto no solo refleja las luchas internas de un partido emergente, sino que también pone de manifiesto las complejidades de la política europea, donde las alianzas pueden ser efímeras y las traiciones, comunes. A medida que la situación evoluciona, será interesante observar cómo se desarrollan las dinámicas entre Pérez, Junco y Solier, y qué impacto tendrá esto en el futuro de SALF y en la política europea en general.